7 cualidades que debe tener un cuidador de ancianos

25th agosto, 2017 Geriatel
cualidades de un buen cuidador de ancianos

Cuando una persona mayor enferma precisa de una atención que, por lo general, suele ser un familiar cercano, normalmente algún hijo. Estos familiares hacen lo posible para poder llevar su vida y gestionar el tiempo entre el cuidado del anciano y su día a día. Estos familiares hacen todo lo posible para “sobrevivir” al tiempo y el esfuerzo que les supone el cuidado; lo hacen lo mejor que pueden.

Esta situación les puede resultar demasiado estresante física y emocionalmente, aburrido, difícil y/ o demasiado perjudicial para su propia vida, por lo que muy poco familiares suelen sostener y aguantar estas circunstancias.

¿Cuáles son los motivos por los que se cuida a una persona mayor?

  • Por motivación altruista, es decir, para mantener el bienestar de la persona cuidada, porque se entienden y comparten sus necesidades. El cuidador se pone en el lugar del otro y siente sus necesidades, intereses y emociones.
  • Por reciprocidad, ya que antes la persona ahora cuidada les cuidó a ellos.
  • Por la gratitud y estima que les muestra la persona cuidada.
  • Por sentimientos de culpa que ocurrieron en el pasado.
  • Para evitar la censura de la familia, amigos, conocidos, etc. en el caso de que no se cuidara al familiar en casa.
  • Para obtener la aprobación social de la familia, amigos, conocidos y de la sociedad en general por prestar cuidados.

¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de contratar un cuidador?

¿Qué hace que una persona sea un buen cuidador, especialmente cuando el paciente es alguien que ni siquiera conoce?  ¿Cuáles son las cualidades que debe tener un buen cuidador de ancianos? Son algunas de las preguntas que se plantean los familiares de las personas mayores.

  1. Personalidad. Este es el ingrediente más importante a considerar. Los cuidadores necesitan un innato sentido del altruismo, voluntad de servir y empatía, además de dulzura, actitud y paciencia para sobrellevar los malos días del paciente.
  2. Experiencia. La experiencia es valiosa, ya que ayuda al cuidador a determinar si puede o no manejar una tarea en particular.
  3. Formación. Es difícil argumentar que los cuidadores con capacitación están más preparados para el cuidado que aquellos que nunca han recibido una educación formal. Sin embargo, si el cuidador tiene una mala actitud o una pobre ética en el trabajo, ni todo el entrenamiento ni toda la formación hará de él un buen cuidador.
  4. Fiabilidad. Los cuidadores trabajan en gran parte sin supervisión. Pida referencias sobre su trabajo, lo que le dará pistas sobre si puede o no puede confiar en él.
  5. Rendición de cuentas. Cómo una persona acepta la crítica suele ser una indicación fiable de si se sienten o no responsables de su paciente. Cualquier persona que no puede admitir los errores del pasado debe ser visto con sospecha. Los cuidadores que echan la culpa de las cosas que van mal a otros, no son de fiar.
  6. Honestidad. La honestidad no sólo significa que el cuidador no robe a los mayores desvalidos o a sus familias. Significa también que ellos llegan con puntualidad, manejan sus responsabilidades con precisión y por lo general pueden dar cuenta de la medicación, los suministros y el dinero que se le encomiende.
  7. Necesidad económica. Tenemos una repulsión natural hacia los cuidadores que abiertamente reconocen que están haciendo este trabajo porque necesitan dinero. Tenemos una tendencia a asumir que significa que no se van a preocupar por nuestro familiar. Después de todo, la mayoría de nosotros mantenemos empleos porque tenemos que pagar nuestras cosas.

En conclusión, un buen cuidador de ancianos es aquél que reúne un conjunto de cualidades intrínsecas que ciertos seres humanos poseen y que otros no. Es todo acerca de la personalidad y la forma en que la personalidad encaja con el paciente y los miembros de su familia.

En nuestros geriátricos en Madrid  están dirigidos a proporcionar un entorno de bienestar para los adultos mayores, en el que encuentren condiciones de afectividad, independencia e intimidad, todo ello con el trabajo que lleva a cabo nuestro equipo humano y profesional compuesto por cuidadores de ancianos que cumplen con todas las cualidades mencionadas.