Los mayores también tienen que disfrutar del verano

No romper con la rutina diaria del invierno y planificar el verano con antelación son algunos de los consejos de los expertos para que los mayores disfruten del verano.

Algunos aspectos a tener en cuenta son conocer la manera de llegar al destino de las vacaciones de verano, las condiciones y la documentación necesaria. Sobre todo, en las personas mayores, es esencial informarse bien y planearlo todo con detalle para detectar riesgos y prevenir los problemas más habituales.

La capacidad de adaptación de los ancianos es «más lenta y difícil».  Aunque las vacaciones de verano  favorecen de manera especial la socialización, el aprendizaje de nuevas cosas y la generación de estímulos cognitivos positivos a nivel mental, la capacidad de los mayores es menor, por lo que es necesario evitar excesos e intentar que la ruptura con las rutinas no sea «tan excesiva» que sobrepase las posibilidades físicas.

Por ello, los expertos recomiendan que, si el viaje es de más de dos horas, favorecer la movilidad de los pies, brazos y cuello para evitar la aparición de coágulos y contracturas; reproducir en la medida de lo posible las rutinas horarias habituales; moderar el cambio de la alimentación y seguir la dieta pautada en el caso en el que se le haya prescrito.

Asimismo, la elección de la vestimenta se debe hacer en función del clima y se debe dar preferencia a ropa cómoda y amplia; y no olvidar la documentación sanitaria, la medicación y llevar un informe médico traducido al inglés, en el caso en el que se vaya a viajar fuera de España.