¿Cómo adaptar una vivienda para personas mayores?

Con el tiempo, la usabilidad de las viviendas debe adaptarse a las necesidades de sus inquilinos. No es lo mismo disponer de una casa para una persona con movilidad reducida que para una persona sin esta situación, los espacios, los objetos e incluso la propia estructura debe adaptarse a la situación y por ello desde Geriatel queremos abordar un punto importante que nos afecta a todos. ¿Cómo adaptar una vivienda para personas mayores? Y es que, una vez llegado a un punto de nuestra vida, nuestra vivienda debe hacernos la vida más fácil y no convertirse en una barrera infranqueable.
Para cada apartado de nuestra vivienda traemos algunas soluciones que te ayudarán a ti o a tus mayores a disfrutar de una mejor calidad de vida:
En primer lugar, nos referiremos al dormitorio, dado que para las personas mayores es importante tener en cuenta que las camas no sean ni demasiado alta ni demasiado bajas, para que no ofrezcan dificultades al levantarse y acostarse. Lo mejor son las camas de media atura, así como los armarios de baja altura para poder coger la ropa sin esfuerzos. Además, es importante no ubicar la cama junto a la pared de la habitación.
En la cocina, la organización es clave. Los armarios deben estar a una altura adecuada para no forzar un accidente, los muebles deben ser prácticos y son preferibles las cocinas de vitrocerámica, permitiendo deslizar ollas y cazuelas con facilidad frente a los fuegos, que están más pensadas en levantar el peso de las mismas.
El salón, dado que será un sitio habitual de permanencia y paso, debe ser un sitio con el espacio necesario para no entorpecer el paso, con muebles con bordes redondeados, teléfono inalámbrico y asientos con reposabrazos y respaldos altos.
Por último, en el baño es recomendable cambiar la bañera por plato de ducha, dado que es frecuente que éste suponga un accidente. Instalar barras asideras y adquirir sillas de baño o duchas especiales, que faciliten el uso por parte de las personas mayores.