Cenar poco y desayunar mucho, un gran truco de alimentación

Los quehaceres de las mañanas a veces hacen que se desayune rápido y mal, o incluso que no se desayune. Esto cambia a medida que avanza la edad, al tener más madurez y necesidades nutricionales pero no se suele desayunar lo suficiente y a veces se intenta compensar con la cena, lo que es lo contrario a lo saludable.

¿Por qué es más saludable cenar poco y desayunar mucho? Porque para metabolizar los alimentos, es más sencillo para el cuerpo hacerlo durante el día y así se evita acumular grasa al hacerlo por la noche en un proceso poco conveniente.

Las calorías también se consumen antes a lo largo del día porque es más probable que se quemen. Además el desayuno ayuda a afrontar el día con energía. Especialmente en los ancianos es importante que por las noches no tengan problemas de digestión ¡hay que alimentarse mejor por las mañanas!