Día Mundial Sin Tabaco: Cómo combatir la ansiedad

29th mayo, 2017 Geriatel
persona mayor fumando un puro

El 31 de mayo de cada año, la Organización Mundial de la Salud celebra El Día Mundial Sin Tabaco, con el objetivo de poner en relieve los riesgos para la salud asociados con el tabaquismo y abogar por políticas eficaces para reducir su consumo.

El lema del Día Mundial Sin Tabaco 2017 es, «El tabaco, una amenaza para el desarrollo».

En la campaña se demostrará que la industria del tabaco compromete el desarrollo sostenible de todos los países y se propondrán medidas de lucha contra la crisis mundial provocada por el tabaquismo que deberán adoptar las autoridades y la opinión pública para promover la salud y el desarrollo.

En cuanto a lo que se refiere el tabaquismo en las personas mayores hay que tener en cuenta la ayuda de los profesionales sanitarios como en las Residencias de mayores en Madrid que pueden ofrecer a los fumadores de este grupo de edad para que dejen de fumar.

Sin embargo, el fumador de edad avanzada presenta características en cuanto a su dependencia al tabaco que deben ser conocidas por el médico dado que confieren una especial problemática a la intervención sobre el tabaquismo.

Generalmente los fumadores de más de 50 años tienen mayor dependencia a la nicotina, fuman más cigarrillos, tienen historia más larga de tabaquismo, más problemas de salud relacionados con el tabaco y muchos dudan de su capacidad para dejar de fumar.

Sin embargo, los fumadores mayores pueden obtener importantes beneficios al dejar de fumar, reduciendo las consecuencias del tabaco sobre su salud, disminuyendo las complicaciones de enfermedades preexistentes y mejorando la calidad y la cantidad de vida.

Por las consecuencias inherentes al propio envejecimiento, se presenta un mayor riesgo de enfermar por el tabaquismo y un mayor riesgo a morir por las secuelas que el mismo provoca en la salud. De la mortalidad atribuible al tabaco, 3/4 partes son producidas por cuatro enfermedades: cáncer de pulmón, EPOC, cardiopatía isquémica y enfermedad cardiovascular, además de otras enfermedades como la tuberculosis y la depresión.

Día Mundial Sin Tabaco, cómo combatir la ansiedad

Cuando se toma la decisión de dejar de fumar durante los primeros días tienes que estar muy alerta y cambiar algunas rutinas porque puede resultar difícil ya que acostumbrar al cuerpo a vivir sin nicotina y sin los automatismos a los que se le ha acostumbrado. Te damos algunas claves para que sepas cómo controlar la ansiedad al dejar de fumar.

  • Comienza por racionalizar tus pensamientos, cuando llevas mucho tiempo fumando el acto de encender un cigarrillo es casi instintivo, no lo piensas mucho, lo haces por costumbre. Piensa que no lo necesitas.
  • Ve el lado positivo, en vez de enfrascarte en que te hace falta, en que lo necesitas, en que te sientes mal sin él, piensa en lo grande que eres por haberlo dejado.
  • Ocupa tu mente, esto es vital, incluso cuando fumabas de seguro notarías que mientras más ocupado te encontrabas menos cigarros tenías la oportunidad de consumir.
  • Ejercítate, esto te hará sentirte más saludable y te permitirá comprobar como tu capacidad pulmonar ha mejorado al dejar el tabaco.
  • Mantén tu fuerza de voluntad y recuerda por qué lo dejaste, entiende que aunque al comienzo es difícil después lo superarás y conseguirás continuar tu vida sin este nocivo habito.
  • Es también recomendado que lleves a cabo una serie de tratamientos que te lo harán más fácil. En la farmacia encontrarás productos pensados para este fin como son los parches, los chicles de nicotina o los cigarillos electrónicos. Si prefieres alternativas más naturales te gustará saber que existen algunas hierbas y alimentos, como la canela o el jengibre que ayuda a reducir la ansiedad.

Día Mundial Sin Tabaco, beneficios al dejar de fumar

Dejar de fumar a cualquier edad produce beneficios muy significativos en la salud.

En el caso específico de los ancianos que llevan décadas fumando, el abandonar este hábito nocivo puede evitar o reducir el riesgo de diversas enfermedades como: las cardiopatías, el cáncer o las enfermedades respiratorias.

Puede estabilizar enfermedades ya presentes, evitando su progresión como la enfermedad obstructiva crónica y prolongar la vida permitiendo un funcionamiento independiente con menos restricciones.

Este punto puede considerarse como uno de los principales argumentos para aconsejar al anciano fumador que abandone su hábito, buscando una mejor calidad de vida frente a la simple perspectiva de prolongación de la misma.